Aproximadamente cada 10 años se produce una inversión térmica en todo el Gran Cañón del Colorado. Las parciales son más frecuentes, 1 ó 2 veces al año, pero suelen cubrir sólo una pequeña parte de su extensión y normalmente no van acompañadas de cielos despejados.
Este fenómeno meteorológico se ha vuelto a producir el último fin de semana de noviembre. En esta ocasión además el cielo estaba limpio de nubes, resaltando el contraste con el mar de nubes de la superficie.
Durante este fenómeno natural el aire caliente queda en altura y cierra el paso al aire frío que hay en la superficie; debido a esto las nubes quedan atrapadas en el cañón.
El invierno es la estación más idónea para que se produzca la inversión térmica. Las noches largas permiten que el aire cercano al suelo se enfríe de forma inusual.
Este es el aspecto que presentaba el Gran Cañón bañado envuelto en un mar de nubes.
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2 comentarios:
SORPRENDENTEMENTE HERMOSO... SIN MAS PALABRAS!!!
Nos alegramos de que te gustara Lindalexita.
Gracias por tu comentario.
Un cordial saludo.
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