Un estudio realizado por biólogos de la Universidad de Rice (E.E.U.U.) con plantas de Arabidopsis thaliana ha determinado el mecanismo químico que utilizan las plantas para el sentido del tacto.
El estudio ha concluido que aquellas cuyos tallos se tocan varias veces al día crecen menos y aumentan sus defensas frente a aquellas que no fueron tocadas.
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| A la derecha se observa el menor crecimiento de las plantas tocadas |
Estudios previos habían observado ya los cambios en el crecimiento, pero no cómo se producía.
El actual determina el mecanismo de respuesta que utilizan las plantas.
El iniciador es el jasmonato, una hormona que regula el crecimiento, también inicia los procesos químicos que llevan a las plantas a producir sustancias químicas que las protejan de los insectos y los hongos.
Si los insectos se comen a la planta, ésta aumenta la producción de sustancias químicas que provocan malestar en sus depredadores. Simultáneamente reduce su crecimiento para evitar ser devorada.
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| Una oruga desencadena el mismo proceso que al tocarlas seres humanos |
El estudio ha demostrado que las defensas se activan cuando las plantas se tocan.
Para realizar el estudio los investigadores tocaron las plantas en el laboratorio desencadenando una reacción igual a la que se produce cuando las tocan animales o incluso el viento.
El estudio se publicará en la revista Current Biology el próximo 24 de abril.
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