El aire acondicionado es uno de los electrodomésticos con mayor consumo energético.
El comienzo del verano es un buen momento para reflexionar sobre el gasto energético de estos aparatos y las emisiones de CO2 que generan.
La eficiencia energética en los edificios e inventos como este desarrollado por James Dyson pueden ayudar a pasar el verano sin recurrir al aire acondicionado.
Estos ventiladores aúnan un diseño innovador con un bajo consumo energético. Su funcionamiento es similar al del motor a reacción. El aire se aspira, se acelera y se suelta al exterior.
El aparato no tiene aspas y su mantenimiento y limpieza es bastante más sencillo que los modelos habituales. El consumo energético es el de un motor de 40 watios, bastante bajo para este tipo de aparatos.
Un paso más para lograr reducir las emisiones de CO2, sin renunciar a la calidad de vida en verano.
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